jueves, 10 de agosto de 2017

Barranco del río Arbillas

Barranco del río Arbillas
Año 2015. Participantes: Julia, María, Mónica, Alejandro, Ángel, Júcar y yo
Año 2017. Participantes: Alba, Goyo, Júcar y yo.

Divertido barranco no muy lejos de Madrid, en la provincia de Ávila, muy recomendable y disfrutón.

Situado en la provincia de Ávila, en las cercanías de la población de Poyales del Hoyo, es un barranco realmente divertido y disfrutón que lo hacen ideal para una escapada de un día desde Madrid, ya que no tiene aproximación, el retorno no es muy largo e incluso se puede acortar algo con combinación de coches, y no es un barranco excesivamente largo.

Es por ello, por lo que decidimos hacerlo, en busca de una actividad para este domingo de 2015.

En 2017 volvimos a visitar este barranco, aprovechando que veníamos a la zona a hacer otro barranco.



Datos: 
Actividad: Barranquismo;      Zona: Ávila
Características: Barranco bastante abierto, acuático, con saltos, rápeles, pasamanos y toboganes. Roca algo resbaladiza, por lo que hay que tener un poco de cuidado. Ojo con algunas instalaciones que pueden estar algo deterioradas. Posible combinación de vehículos para acortar algo el regreso, pero tampoco muy necesaria.

Croquis:

En azul el recorrido del Barranco y el anaranjado el retorno. También marcadas las posibles zonas donde dejar el coche


Tiempos:
Los tiempos aproximados son los siguientes:
  • Aproximación desde el coche al inicio del barranco: inmediato
  • Descenso del Barranco: Unas 3 horas aproximadamente recreándose en los resaltes y bajando tranquilamente
  • Regreso al coche: menos de una hora, sin hacer combinación de coches. Unos 20 min con combinación de coches

Track:
Ajeno (pincha aquí para acceder al track en wikiloc).
Aplicado ajustes de altitud al mapa para sacar el perfil gráfico, ya que el track tiene muchos valores erráticos de altitud.
Si se hace combinación de coches el track finaliza en el km 1,9 del mismo.


Índice IBP: entre 22 y 32



Fecha:  13 de septiembre de 2015 y 7 de octubre de 2017

El relato principal que voy a hacer es el de septiembre de 2015, pero intercalaré algún párrafo de la visita de octubre de 2017. Para distinguirlas las partes de octubre de 2017 van en azul para diferenciarlas bien. Las fotos también van intercaladas e indico también a cual de las dos veces corresponde
Partimos desde sitios distintos, así que quedamos en juntarnos directamente en Poyales del Hoyo. No hemos madrugado mucho, ya que no es necesario.

Tras algún pequeño recorrido por el pueblo, creo recordar que para comprar pan y/o tomar algún café, y algún pequeño despiste para salir del pueblo en dirección al inicio del barranco, aparcamos en la curva de la carretera, que ya tiene un buen apartadero para dejar los coches. Ángel ha llegado un poco más tarde y se ha dirigido directamente al inicio del barranco, por lo que allí nos hemos juntado todos.

Hemos desestimado hacer la combinación de vehículos porque creemos que no vale mucho la pena.

  • 2017: Hemos quedado directamente en el inicio del barranco. Allí comemos de bocata y a continuación llevamos un coche para hacer combinación de vehículos. La combinación de vehículos se prepara bastante rápida y te ahorra al final 20 minutos o incluso algo más de caminata, así que si se tiene posibilidad y no es mucho lío, como es el caso, creo que vale la pena hacerla.

El el aparcamiento nos equipamos tranquilamente con el neopreno, arnés y todo lo necesario para hacer el barranco. 

2015: Equipándonos en el aparcamiento que hay al inicio del barranco

Una vez listos nos dirigimos al inicio del barranco, que es una gran poza que está ahí mismo. Aunque en el croquis viene como salto de 5 metros (desde arriba yo creo que hay más, lo que me hace dudar de que el salto marcado en el croquis sea desde allí), no parece muy recomendable saltar a ella desde arriba del todo  ya que hay enormes rocas sumergidas que lo hacen peligroso, pero simplemente bordeando por la derecha uno ya puede saltar a diversas alturas, escogiendo la que mejor le parece. Al principio saltamos desde no muy alto, para la toma de contacto, pero enseguida algunos se animan y saltan desde un poco más alto. Es un buen inicio para adaptar la temperatura corporal y emocional.

2015: Primera poza, que saltamos desde el lado derecho, al principio más abajo, como se ve, pero luego iremos saltando más alto, a gusto de cada uno

Transcurrido el primer desfogue de la primera poza, nos disponemos ya a seguir el curso del barranco. También hemos comprobado lo resbaladiza que es la roca, lo que nos sirve para ir a partir de ahora con precaución en este sentido.

La continuación son dos chulos rápeles, separados por unos metrillos de transición por la roca con agua, siendo el primero por el lado izquierdo del cauce, y el segundo por el derecho. Aunque es posible que pudiera hacerse todo en un único rápel, creo que no es lo más apropiado y lo mejor es hacerlo así en dos. 
 
2015: Borde de salida de la primera poza, donde está el rápel para el siguiente resalte
2015: Bajando este resalte con dos rápeles

  • 2017: Vamos tan confiados en que conocemos el barranco que no nos hemos ni fijado en los croquis. Por ello, hacemos estos dos rápeles de tirón creyendo que es uno solo... el problema es que tenemos en la cabeza de la otra vez que el rápel más largo es de 20 metros, con lo que llevamos una cuerda de 40 metros... Si consideramos que hacer estos dos rápeles en uno supone un rápel de unos 30 metros, uno ya se puede imaginar que las cuerdas se nos van a quedar cortas... y efectivamente, cuando rapelo el último, de repente se me acaba la cuerda... menos mal que el tramo intermedio me permite recoger fácilmente el rápel y montar otro en la instalación intermedia.
2017: Me quedo sin cuerda a mitad de rápel...
2017: Afortunadamente se puede apañar bien y rápidamente gracias a esta zona intermedia
Después de este inicio, toca andar un ratillo por el cauce sin econtrar ningún resalte. Son unos 200 metros aproximadamente, en los que se pasa bajo un puente de piedra.

Pronto encontramos uno de los dos resaltes más llamativos de este barranco. Se trata de una gran rampa de roca que hace de tobogán y que acaba en una pequeña poza. Son unos 6 metros de tobogán, pero acaban en un cortado de 2 metros, ya que la poza no está a la altura del final del tobogán sino esos 2 metros más abajo. La verdad es que impone un poco, ya que el tobogán es bastante alto y resbaladizo, dando sensación que vás a coger velocidad, y la poza a caer no es muy amplia. Afortunadamente hay una cuerda con nudos que te puede ayudar a descender controladamente hasta donde quieras ya soltarte del todo.

2015: Mónica deslizando controladamente
2015: Cayendo tras acabar de deslizar por el tobogán
2015: Alejandro en acción.

Como es de suponer, echamos un rato aquí, tirándonos varias veces, cada vez de forma más atrevida según vas tanteando la cosa, pero lo cierto es que con nada de velocidad que cojas, al menos los adultos, caemos tocando o incluso impactando levemente con las extremidades con el otro borde de roca de la poza, así que hay que tener cuidado.

  • 2017: Me tiro yo primero por el tobogán con ciertas precauciones recordando que en 2015 al caer llegué a tocar con la roca de enfrente. Sin embargo esta vez está mucho menos resbaladizo, quizás por ir con algo menos de caudal, y no te embalas tanto como en 2015.

2017: Me fotografían desde arriba del tobogán tras haberme tirado yo

Inmediatamente tenemos un salto de 4 metros, algo estrechos, de esos de dar un paso adelante y dejarte caer. Algunos también repiten este salto. Si no vas atento puede que te escaquees este salto por la derecha sin darte cuenta, pues está ligeramente escondido.

2015: María en el salto vertical de 4 metros
2015: Se cae en esta poza
2015: Salida de la poza
2017: Saltando a la poza

Avazamos, pasando algún que otro pequeño resalte, y pronto llegamos al resalte más salvaje de todos. También lo ponen como posible salto desde arriba del todo, de 9 metros. Desde luego desde arriba en mi opinión saltar es de locos, puesto que no se ve un salto fácil ni se ve a dónde vas a parar a caer, pues la caida no es en tu vertical sino que hay que impulsarse para caer un poco más adelante, a ciegas. Yo creo que desde ahí solo veo factible saltar al que, además de estar un poco pirado, se conozca perfectamente el barranco.

Las alternativas son descender un poco por la izquierda o por la derecha, para buscar un punto de salto más razonable, aunque también se puede rapelar todo hasta el agua y santas pascuas. Por la derecha hay un pasamanos en muy mal estado. Nosotros optamos por el lado izquierdo, montando un pasamanos que nos permite llegar a una zona donde hay varias posibilidades de salto a distintas alturas. Vamos descendiendo todos y saltando, salvo las niñas, que prefieren rapelar hasta el agua. Júcar y Alejandro, que cierran el grupo, buscan un punto para saltar un poco más alto que el que hemos usado los demás.

2015: Bajando por el pasamanos que hemos montado
2015: Saltando
2015: Alejandro saltando desde un poco más alto

  • 2017: Esta vez bajo yo primero por el pasamanos de la izquierda hasta la instalación y desde allí ayudo a los demás a llegar. Desde allí se puede saltar o rapelar. Alba rapela unos metros más abajo para no saltar desde tan alto y Júcar la acompaña. Goyo y yo saltamos desde arriba, que será un salto de unos 7 metros. Me hace gracia el comentario de Goyo tras saltar, que dice que el salto era altito, porque le ha dado tiempo a repasar mentalmente toda la lista de la compra mientras caía, jajajaja.
2017: En la instalación, preparados para saltar

2017: ¡Allá voy!

Lo siguiente es un resalte que tiene un pasamanos para llegar a una especie de tobogán.

2017: Alba tirándose por el tobogán

Continuamos y vamos descendiendo algún resalte más, ya con resaltes algo más normales, y según se va llegando al final parece se van acumulando cada vez más los resaltes. En muchos casos hay doble instalación, una en el lado derecho y otra en el izquierdo. También hay mezclas de destrepes, pequeños saltos, etc, que hay que hacer con cuidado ya que la roca resbala bastante.

2015: Rapelando uno de los resaltes
2015: Parece que al final se van acumulando los resaltes
2017: Rápel final. En 2015 por aquí caía agua

Después de esta aumulación de resaltes, cuando el panorama cambia redicalmente y el cauce parece que se "tranquiliza" un poco, si miramos a la derecha justo desde el final del último rápel se ven las ruinas de un molino, que es por donde se sale del barranco. Medio trepando un poquillo pero sin niguna dificultad, llegamos al molino. Ya junto al molino nos juntamos y nos hacemos las fotos finales.

2015: Ángel nos hace una primera foto final...
2015: ... y luego intenta hacer otra con autodisparador para que salgamos todos. Sale algo peor, pero por lo menos estamos todos.
2017: Foto final tras subir al molino

Parcialmente aliviados de nuestros neoprenos iniciamos el retorno. Aprovechando que el recorrido hace una gran zeta, un grupillo intenta, al poco de iniciar el retorno, acortar subiendo directamente; otros optamos por no complicarnos y seguir el camino de retorno normal. Lo cierto es que los que seguimos el camino normal de retorno llegamos al coche bastante antes que los que han intentado atajar, así que les ha salido mal.

  • 2017: Esta vez hemos hecho la combinación de coches. Yo creo que fueron unos 15 o 20 minutos como mucho los que tardamos en plantamos en el coche. La verdad es que después de haber probado una y otra opción, en mi opinión vale la pena hacer la combinación de coches si se tiene posibilidad.

Una vez en el coche, nos cambiamos y comemos.

Cogemos el coche y nos disponemos a hacer el viaje de vuelta, pero pasando por Arenas del San Pedro para dar un paseillo antes de despedirnos del todo.


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